Todo había resultado como lo
esperaba. La jamones estaba muriendo de miedo, pues sabía que ella era la siguiente.
Decidí esperar algunos días para
al fin terminar con esto. Exactamente espere 15, se sintieron eternos, pero
eran necesarios.
Para ese entonces la jamones ya
no salía de su casa ni para ir a la escuela, y siempre había alguien acompañándola.
Tenía que actuar diferente esta vez, hacer algo que realmente dejara en claro
que, aquí la única que podía dar lecciones a los demás era yo.
Estuve una semana completa
acechando su casa y cada uno de sus pasos. De este modo pude notar que solo había
dos momentos en los que podía encontrarla completamente sola, y los dos eran
muy convenientes. Ahora podía elegir entre atacarla en la ducha o mientras
dormía. Decidí que la ducha era mi mejor opción.
Nunca olvidaré aquel lunes en que
fui tras ella. Era un día nublado y el viento soplaba fuertemente. Eran las 6:55 cuando entré a su casa por la puerta trasera, yo sabía donde estarían
todos en esos momentos, por lo cual logre entrar sin que nadie lo notara.
Sigilosamente fui hasta el baño y
espere a que dieran las 7:00. Hora en la que siempre se metía a bañar. Pero algo salió
mal, antes que ella entró su hermanito y me vio. El niño asustado quiso gritar
pero no le di tiempo, lo ataque y sin pensarlo dos veces acabe con su vida acto
seguido jale el cuerpo, lo metí a la tina y seguí esperando a que la jamones
entrará.
Después de 5 minutos entró a
quien tanto había esperado, al fin era el momento.
Yo estaba detrás de la puerta,
eso me daba ventaja. Cuando cerro la puerta y me vio intento gritar, pero fui
más rápida y se lo impedí. Le cubrí la boca y nariz fuertemente obligándola a
inhalar cloroformo, rápidamente perdió el conocimiento.
En el tiempo que estuvo inconsciente
la ate de pies y manos, la amordace para impedir que gritara, cubrí todas las
posibles salidas de ruido del baño y preparé mis cuchillos para comenzar con lo
que sería la lección más grande de su vida.
Si ella no quería ser la jamones,
iba a dejar de serlo y yo como soy tan bondadosa la iba a ayudar.
Esperé a que reaccionara, quería que estuviera consciente
de lo que estaba haciendo por ella. Cuando comenzó a moverse de nuevo, tomé uno
de mis cuchillos y estaba a comencé a cortar cada parte que "sobraba" en su asqueroso cuerpo.Vi su cara, su miedo,dolor y lágrimas. Me sentí mas viva y realizada que nunca, este era el momento que había estado esperando. Ya nada podía arruinarlo.
Después de que terminé mi obra maestra,salí del mismo modo en que había entrado en aquella casa. Ahora estaba lista para ir a festejar con mis amigas que todo había terminado.
Después de que terminé mi obra maestra,salí del mismo modo en que había entrado en aquella casa. Ahora estaba lista para ir a festejar con mis amigas que todo había terminado.